Vuela por mi piel tu mano tibia
orbitando el sueño en mi alborada,
en misión secreta, dentro de mi cama
por constelaciones innombradas.
Se aferra el imán de las caderas
con la fuerza loca de dos bocas
sin voluntad propia, ya sin resistencia
como alas delta que se chocan.
Somos bimotor en caída libre,
un Sputnik que va a la deriva
sin pares y nones, piel en piel nacida
buscando un planeta de poesía.
*
Ali, imposible mas sensualidad, sensible, elegante y diáfana! con tantos matices en tan pocas palabras que ojalá pudiese existir una realidad que se le aproximara! engrandeces el pensamiento y lo real!
ResponderEliminarmaestraaaaa! gracias! ML
Querida María Luisa, tomo tus palabras con tanto cariño y quedan repicando en mi cabeza; no sé si existe en realidad un compañero de vida tan piel en piel nacida, que ame con la intensidad que una los ama. Ojalá sea así.
ResponderEliminarUn abrazo, linda.
Buscamos lo impredecible Alicia, y eso cuenta.
ResponderEliminarLo sé, Joel, ambos buscamos ese mundo sutil de la poesía. Gracias por tu visita.
ResponderEliminarUn abrazo.