Estaba loca sí,
loca de atar decían,
pero la loca era una loca suelta,
suelta y libre,
tan peligrosamente libre que
hubo que atarla.
Porque en la esquina
bailaba sola,
iba y venía,
hasta que un día
sacó un cuchillo
y el mundo entero
se enloqueció.
Estaba loca,
loca de atar
y hubo que atarla
como decían
porque en la esquina
con un cuchillo
iba y venía.
Iba y venía
la malandrina
y era preciosa
la loca suelta
que estaba loca y no lo sabía
y en esa esquina tan peligrosa
con su cuchillo
se desató.
Hasta que un día
cantaba sola
la loca suelta
y era tan libre
la malandrina
que iba y venía
y el mundo entero
se enamoró.
Estaba loca,
loca de atar
y en un descuido
perdió el cuchillo.
Era preciosa y no lo sabía
y el mundo entero
que iba y venía
sólo quería
verla cantar.
verla cantar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario