Datos personales

Mi foto
Escribo desde siempre. Sin pretensiones intelectuales, ni locas vanidades de reconocimiento. Alentada por la persona que más amé en el mundo, a quien agradezco y humildemente dedico este blog... a mi madre.-

Bienvenidos

Aquéllos que me conocen me reconocen en lo que escribo, los que no, pueden empezar a hacerlo desde aquí; de cualquier manera ten la gentileza de dejar tu sincera opinión.
Ojalá lo disfruten.-

viernes, 1 de noviembre de 2019

SIN AMARRAS




Mis brazos de bahía, mis besos de agua mansa, 
claros de luna llena detrás de una mirada,
cielo de mil tormentas, mi voz una ensenada 
y tú como una tromba que me inunda y me traga.
Si apenas un segundo encallas en mi playa 
y apagas tus motores resolviendo echar anclas, 
yo calmaré los vientos que antes te empujaran, 
aquietaré tus remos, endulzaré tus aguas,
te abrigaré en mi muelle, te ofreceré mi calma 
pero en mi puerto nunca se anudarán amarras.


Te daré mil palomas arrullando ventanas,
un café perfumado con azahar de naranjas,
mi sendero de arena que llega hasta la playa
donde algunas sirenas se ven por las mañanas.
Te ofrezco mis canciones, te presto mi guitarra,
mi coro de gaviotas y notas emplumadas.
Te mostraré mis sueños recién espabilada
Te contaré en secreto todas mis esperanzas.


Si tras el horizonte te tientan otras playas
y las olas te buscan y te enredan las algas,
no te sientas varado masticando resacas
y aprovecha del viento y las mareas altas.
Llévate las estrellas y que guíen tu marcha,
llévate el arcoiris, llévate la esperanza
deja sólo una estela dibujada en el agua
por si zarpar quisiera detrás de tu barcaza...
pero es tarde en el río y en tierra firme mi alma
ya no quiere derivas ni lidiar con piratas


Yo te ofrezco el tesoro de tardes en mi casa
horizontes de leña ardiendo entre las brasas,
mil charlas inconclusas, historias inventadas,
ceñirme a tu cintura en largas caminatas.
Quererte con locura, darte una serenata
te ofrezco el mundo entero navegando en mi almohada.

pero en mi puerto nunca podrás atar amarras.

sábado, 5 de octubre de 2019

EL ÁNGEL CAÍDO




Era un ángel. 
Tuve alas que nacían en mi espalda.
Mi piel casi dorada, reflejaba crepúsculos y auroras boreales.
Encendí las estrellas, bañé campos y flores con rocío.
Vagué por el aire protegiendo mendigos, el sueño de los niños y ancianos afligidos.
Era amor y pureza, era calma y alivio.
Yo repartí la gloria del amor infinito.
Anuncié con trompetas la llegada de Cristo y fui guardián celoso haciendo compañía.
Una noche de luna volé hacia el horizonte y llegué a los confines que tiene el universo y aunque era un inexperto creí hallar la manera de pasar la barrera. 
Ya nada era imposible para un ser como yo.
Y me quedé dormido en celestial quimera hasta que las estrellas dejaron de brillar.
De pronto un torbellino me revolcó en el aire. Un viento pavoroso formó mil remolinos y un vórtice divino me rodeó sin parar. Sentí que mi energía pronto se disipaba, la fuerza me flaqueaba y deje de flotar.
CaÍ sobre la tierra.
Mis alas ya no estaban y en su lugar dos huecos sangrientos, dolorosos.
Mis ojos lacrimosos, la penumbra, el silencio, la tristeza profunda, mi rostro ceniciento y el saber que ya nunca al cielo iba a subir.
Yo fui un ángel hermoso, un bello querubín.




Monumento al Ángel Caído de Ricardo Bellver

martes, 3 de septiembre de 2019

BUSCO



Ando buscando quien me proteja,
quien me cure las heridas, 
quien me abrace mientras duermo,
quien comparta su alegría


Ando buscando caramelos 
de palabras nunca dichas,
busco estrellas fugitivas
para prender en mi pelo;
busco una falda floreada
para arrastrar por el suelo 
y el sonido de tu risa 
para romper el silencio.


Busco el remo que haga juego
al remo de mi canoa 
que me impulse  por el río
con la caricia del viento 
pero si en algún momento
fuéramos a la deriva 
que ambos hallemos la isla
más secreta y escondida.

Busco estrellas, busco sueños,
una piedra diferente, 
la pluma que se ha caído, 
un latido intermitente. 
El bostezo, la caricia, 
el abrazo, la alegría, 
el reflejo de la luna,

yo busco tu compañía. 

lunes, 2 de septiembre de 2019

ES INVISIBLE


Es invisible el tiempo, la soledad, la vida,
invisible el proyecto que se forma en la idea,
invisible es el canto, la música, el suspiro,
invisible me vuelvo y todo tambalea.

A medida que pasan las noches y los días
mi sombra se diluye y me hago transparente,
mi fuerza disminuye, ya nada me sorprende,
sólo me queda el ancla de la palabra escrita.

Apenas sobrevivo sobre el mantel a cuadros
que recoge los pétalos de las rosas marchitas
infinitos silencios, perfumados rosarios
y allá bajo la lluvia lloran las margaritas.

Invisible la fe que mueve a la montaña,
invisible tesoro que no a todos conforma,
el manto protector, la prédica, la norma
así como el milagro que a aquélla dignifica.



sábado, 27 de julio de 2019

A CIELO ABIERTO



A cielo abierto, entre los pájaros,
mi alma rebelde se va volando buscando algo
hace unos giros, cae en picada,
remonta nubes o vuela bajo muy apurada

Mi alma parece no querer nada 
con su destino dentro de un cuerpo, aprisionada
y se me escapa a cada rato
en un suspiro, en una lágrima o en un relato.

Cuando regresa, tan aliviada 
parece niña con su melena desordenada,
vuelve ligera como una pluma
y se acomoda dentro del pecho como si nada.

domingo, 9 de junio de 2019

GERMINANDO

Hoy puedo morirme en una estrofa
entre el carbón retinto y la guitarra
o tal vez desmayarme entre las hojas
de alguna partitura toda blanca.


No sé si al respirar me sienta viva
o el aire me desgarre las entrañas,
hoy quiero desarmarme de alegría
y saturar de versos las mañanas.


Hoy puedo sucumbir en un cuarteto
o quedar suspendida entre comillas,
rendirme de dulzura en un soneto,
o quebrarme con palabras sencillas.


No sé si deshojarme en seguidillas,
bailar la noche entera una canción
persiguiendo mis sueños en puntillas
para no despertar a la ilusión.


Hoy podría gritar entre renglones,
armarme de valor con ritmo y métrica,
saltar a los abismos de emociones
volar en un compás de puño y letra


Bailar, vivir, soñar, morir y a cuestas
llevar esta locura compañera
como quien va llevando una carreta
repleta de semillas, donde quiera.


Y si al final del día, entre papeles
la muerte me atrapase somnolienta,
yo sé que he de brotar entre anaqueles
de alguna biblioteca polvorienta.


Ergo si he de morir, lo haré tranquila
pues muerta viviré en la paradoja,
en la penumbra gris de alguna estrofa
o en la brillante luz de tu pupila.


*


Junio 2019